martes, 13 de mayo de 2014

¿Cuándo se convirtieron los perros en mascotas?

El perro es el mejor amigo del hombre. Esa es una verdad incontestable para muchas personas, que encuentran en los perros un fiel compañero. La pregunta es: ¿desde cuándo lo son? Uno de los grandes problemas a la hora de estudiar la historia de los perros como animales de compañía es que las diferencias entre los chacales, los coyotes y los lobos son muy pequeñas, lo que sumado al hecho de que se han encontrado huesos de las tres especies en asentamientos humanos antiguos, hace complicado establecer cuándo fueron domesticados los lobos.


Hay una línea de pensamiento que defiende que provienen de otras especies caninas, como el chacal, otra que sugiere que proviene de una especie ya exista o incluso que es una mezcla de diferentes especies. Sin embargo, los estudios de ADN han determinado que hay un gran parecido entre los perros y los lobos actuales, por lo que la teoría más defendida es que los lobos fueron los ancestros de los perros.

Lo que sí se sabe con certeza es que los perros han formado parte de la vida de los humanos desde mucho antes que otros animales domesticados, como vacas, caballos, cerdos y gatos, fundamentalmente por su carácter sociable. Uno de los debates aún abierto es la domesticación de los primeros perros. Hay quien data el primer perro doméstico hace 15.000 años (basándose en las diferencias del ADN y de la estructura ósea de algunos restos de lobos sugieren que eran perros). Esa teoría está respaldada por el hallazgo de una mujer enterrada con un cachorro en Israel hace 12.000 años. Sin embargo, hay estudios que señalan Asia como el origen de los perros domesticados y lo remontan hasta hace unos 120.000 años.

Entre tanta incertidumbre, sí hay una cosa segura: los perros viajaron por el estrecho de Bering hasta América hace 15.000 años, ya que los estudios de ADN han demostrado que los perros no son descendientes de los lobos grises de Norteamérica, y que sus orígenes genéticos provienen de Asia y de Europa.

La estrecha relación que hay entre los humanos y los perros va más allá de su historia en común. Como hemos dicho, los perros son animales muy sociables, una cualidad rara en la mayoría de animales. Por tanto, son una gran compañía. Pero no sólo eso: también son grandes cazadores y son territoriales, por lo que pueden ser un gran modo de vigilancia para las casas, especialmente en la antigüedad.

Durante los imperios griego y el romano, los perros empezaron a aparecen en esculturas y pinturas sobre el día a día. Como las personas, también tenían un estatus determinado: cazadores, pastores, guardas o simples mascotas. A partir de ese momento, los perros siguieron con su “conquista” del mundo de los humanos. Algunas familias reales europeas tenían perros como animales de compañía y estos tenían sus propios sirvientes.

Conocer la historia de los perros es conocer parte de nuestra historia, de cómo nos hemos relacionado con otras especies y qué hemos buscado en la que hoy en día es la mascota más querida de todas.

 Fuente: www.iberpet.es